No hacía ni 10 meses que tenía en  mis manos mi primer móvil, el Panasonic G450 del que os hablé hace unos días, y me surgió una increíble oferta en el Corte Inglés.

Era la época en la que las tarjetas de prepago eran las reinas del mambo y los contratos se destinaban a «gente de dinero». En aquel momento la ocasión fue pintiparada y por 10.000 pesetas conseguí un precioso Siemens SL 10 con un saldo de 14.000 pesetas más un cupón con otras 1.000 pesetas entregando tus datos.

Sólo por el hecho de tener esa oferta ya era suficiente y mucho más recibir ese móvil a cambio.

El SL 1o era un increíble terminal, mucho más pequeño y compacto que el G450, más liviano y en formato slider que permitía escribir mensajes con mucha comodidad con un teclado muy sensible. Además tenía una característica que sobresalía por encima de las demás, ¡era en color!

Bien es cierto que ese color distaba mucho de los 16 millones de colores de las pantallas actuales y su gama se extendía hasta los 16 colores.

Características:

Dimensiones: 129 x 50 x 26 mm

Peso: 138 g.

Batería: 570 mAh.

Duarción en reposo: 85 h.

Pantalla: 97 x 54 pixels, 6 líneas

Compañía: Airtel.

Precio: 10.000 pesetas.

Duración: 8 meses.

Aún no teníamos vibrador, se cargaba mediante un dock incluído en el pack original y tenía la problemática de que si apagábamos el terminal por la noche la alarma no sonaba, algo que era impensable en aquella época pero que sigue ocurriendo hoy día por ejemplo en Android.

Como novedades, además de su pantalla en color, teníamos un puerto IrDA (Infrarojos) o una batería de lítio que ya no tenía efecto memoria y podía cargarse siempre que se quisiese en lugar de esperar a que se agotara.