Hace casi diez años, un magnífico profesor de matemáticas de la facultad nos llevo, a mis compañeros y a mi, a dar una vueltecita por Carrefour para intentar descubrir errores o publicidad engañosa en los carteles o precios. Ciertamente fue una experiencia curiosa y desde entonces voy revisando casi enfermizamente carteles y precios allá donde voy.

          Ayer me topé con un curioso error en el supermercado Más. El caso trata sobre unas botellitas de aceite con un cartelito pegado debajo, mirando el precio pensé que eran un poco caras ya que costaban 2,42 € y eran de tan sólo 250 cl, al mirar el importe por litro que suele aparecer en pequeñito abajo casi me caigo de espaldas, ¡¡¡ 96,81 €/L !!!

          Eso si que es un litro caro y no el de gasoil, no me di cuenta en un primer momento pero rápidamente caí en la cuenta de que había un pequeño error que hacía multiplicar su precio hasta el infinito.

          Si repasamos las unidades métricas que dábamos en básica (mi querida EGB), recordamos que 250 cl es lo mismo que un cuarto de litro, o lo que es lo mismo, cuatro botellas de 250 cl son 1 litro.

          Haciendo la cuenta de la vieja:

250 cl + 250 cl + 250 cl + 250 cl = 1 litro

2,42 € + 2,42 € +2,42 € +2,42 € = 9,68 €

9,68 € ≠ 96,81 €